Contigo, estoy dispuesta a todo, lo quiero todo.
Hay cosas que simplemente suceden, no logramos entender cómo, pero suceden y sin imaginarlo, nos dejan una huella imborrable en el corazón, en nuestra vida. Como esas pequeñas cosas, pequeños detalles que sólo pasan y sin explicación, nos dejan esa sensación de que, hasta entonces, aún no nos había pasado nada, de que aún no habíamos vivido nada y empezamos a dudar de que habíamos estado sintiendo antes de conocer a esa persona, ¿qué era lo que me hacía sentirme feliz?.
Tú eres diferente, tú no pasas, tú sucedes. Apareces y aconteces. Tienes la capacidad de convertir en activo todo, provocando que a un proceso que es tan normal para todos, tan automático como respirar, provocas que le dedique atención de nuevo. Así eres tú, tan lleno de todo, con tu capacidad de hacer que mi corazón se acelere y se detenga al mismo tiempo cada que estamos juntos, congelas todo, el tiempo, el espacio...todo se vuelve relativo a tu lado.
Cualquiera en su sano juicio se habría vuelto loca por ti |
Quiero decirte que cuando no estás conmigo, siento que me ahogo, es muy ilógico, pero así son mis sentimientos, ilógicos. Porque cuando me faltas tú, siento que me falta el aire. Y es que eres tan diferente, tan tú, no te pareces a nadie, y eso es lo que me hace necesitarte siempre, porque esta locura es diferente, y no es que yo este loca, simplemente, cualquiera en su sano juicio se habría vuelto loca por ti.
Y es que quiero perderme en tus ojos, y que ya nadie me rescate, podría quedarme ahí sin problemas. Que mi brújula se quede sin pila y mi timón sin rumbo, para no tener que regresar jamás y que al acelerar, nos quedemos sin frenos. Porque contigo, lo quiero todo.